La exposición en el Pablo Serrano subraya la autoría polifacética del cineasta catalán
Las trayectorias creativas se asocian a estilos, temáticas y ámbitos determinados, si bien por sus inquietudes hay autores que trascienden esas catalogaciones. De Bigas Luna, fallecido en 2013, se conoce su icónico y distintivo legado cinematográfico (‘Angustia’, ‘Jamón, jamón’, ‘Huevos de oro’, ‘La teta y la Luna’, ‘Bámbola’, ‘La camarera del Titanic’, ‘Yo soy la Juani’…), no tanto su interés por otras expresiones artísticas. El IAACC Pablo Serrano expone hasta el 10 de diciembre una selección de las obras que realizó el director desde los años 70 y que permiten redescubrir su figura a través de su carácter polifacético. ‘El otro Bigas Luna. La seducción de lo tangible’ ejerce a su vez de homenaje e invita a revisar la filmografía del transgresor y controvertido cineasta catalán, vinculado a Zaragoza en lo afectivo por ser la ciudad de su pareja Celia Orós, quien ha cedido el material, y en lo cultural como señalan el actual emplazamiento de la ofrenda de flores a la Virgen del Pilar y su colaboración con el cabaret El Plata.
En palabras de la comisaria Raquel Medina, la muestra plasma sus obsesiones e imaginario y señala su hiperactividad creativa y su necesidad de alternar el cine (en cierto modo lo virtual) con trabajos ‘reales’ que pudiera tocar. El recorrido expositivo refleja la evolución en sus formas de experimentación y consta de cuatro ámbitos. Del primero, ‘Génesis de una creatividad diversa’, destaca su colección de imágenes captadas con Polaroid. ‘Retratos ibéricos’ recoge fotografías y montajes en el marco del rodaje de ‘Jamón, jamón’ en Los Monegros, de cuyo estreno se han cumplido 25 años.
En el apartado ‘Erosignos, orígenes y retazos de vida’ aparecen sus dibujos sobre hojas de guiones y anotaciones, algunas unidas por alfileres. También incluye la serie ‘A flor di pelle’, integrada por ampliaciones de negativos manipulados. Por último, ‘Simbiosis creativa con la naturaleza’ se compone de trabajos en técnica mixta sobre grandes lonas envejecidas a la intemperie y guiones deteriorados, apilados y empaquetados.
Junto a fotos, pinturas y ‘collages’ pueden leerse significativas frases del barcelonés. “La comida y el sexo, junto con la espiritualidad, simbolizan mi vida y mi creación” sobresale entre todas ellas al condensar su ideario y filosofía.
‘El otro Bigas Luna. La seducción de lo tangible’, promovida por el Gobierno de Aragón, el Ayuntamiento de Málaga y la Diputación de Tarragona, tiene como complemento idóneo el libro homónimo en el que Medina analiza su aportación artística. Su inauguración (13 de septiembre) coincidió con el tributo a la obra del cineasta en el marco de la XI edición de ProyectaAragón.