¿Has dicho alguna vez ‘yo tendría que escribir el libro de mi vida’? ¿O bien, ‘buff, si yo escribiera mis memorias’? ¿Te has planteado contar anécdotas que te han ocurrido en tus viajes o en tu trabajo para dejar un testimonio para la posteridad o para compartirlo con tus amigos o familia? Pues bien, si no has empezado ya, aún te quedan unas semanas de cuarentena para coger un cuaderno y bolígrafo a ver qué sale.
Lo primero que tienes que hacer es quitarte el miedo. Cervantes no escribió El Quijote la primera vez que se sentó en un escritorio con la pluma. La cuestión es ponerse a escribir a ver qué sale, con el folio en blanco, qué es lo que la mente te dicta.
Si ves que no te brota nada más que ideas sueltas, intenta hacerte un guion de todo lo que te gustaría contar, una especie de índice. Y, a partir de ahí, vete apartado por apartado, desarrollando todo lo que te fluya, lo que te venga a la cabeza.
Ve rellenando apartados y capítulos libremente, ya tendrás tiempo de revisarlo, de cambiar unos párrafos a otros capítulos donde encajen mejor, de corregir las faltas de ortografía y gramática, que las tenemos todos…
Si, cuando lo tengas todo más o menos ordenado, te gusta lo que has escrito y tienes intención o deseos de publicarlo, ten en cuenta que hay editoriales donde puedes pagar para que te lo publiquen. Muchas tienen servicios de corrección, edición, maquetación, etc. para que el producto que saques al mercado, aunque solo sea para tus familiares, tenga unos mínimos de calidad.
Eso es lo que requeriría cualquier editorial seria para publicar una obra, así que si tu intención es lanzarla en librerías, no dudes en pedirle a un profesional de la escritura y de la edición que te lo perfeccione. Cuatro ojos siempre ven más que dos.
Además, estos también te pueden ayudar a prevenirte contra todas esas ‘pseudoeditoriales’ que te prometen publicar tu obra por todo lo alto con promoción a nivel nacional e internacional, portadón, publicidad, entrevistas, etc. pero, en cuanto cobran tus miles de euros, desaparecen y, como mucho, te envían 100 ejemplares para que tú los vendas entre tus seres queridos. Mucho ojo con estos timadores.
Amalgama Escritores es un proyecto surgido de La Colaboradora que se encarga precisamente de asesorarte desde la escritura o la revisión hasta la intermediación con editoriales decentes, tanto de autopublicación como de las de toda la vida.
Antes de que te estafen, es preferible que escribas lo que te salga del alma y te lo encuadernes para tu propia biblioteca personal, desde mi experiencia como escritora por lo menos. A mí me estafaron con el bestseller Anécdotas de Enfermeras, el editor se fue quedando durante décadas con todos los millones derivados de las ventas, con todos mis derechos de autora. Y, honestamente, si el libro se hubiera quedado en mi ordenador, me habría sentido mejor que sabiendo que estaba dando beneficios solo en sus cuentas corrientes.
Así que disfruta del hobby de la escritura ahora que puedes, por el placer y la catarsis de escribir en estos momentos tan convulsos, donde expresar las emociones es tan necesario, y todo lo demás ya lo irás viendo.