El director y guionista cuida la dimensión emocional de ‘Los hombres de verdad no lloran’, corto sobre un padre y su hijo enfermo enmarcado en el contexto deportivo que conoce como jaqués y exjugador
Las dificultades hacen tambalear las ilusiones, pero pueden surgir momentos inesperados que alegran, alivian y sirven de estímulo en un proceso que requiere ánimo y perseverancia. ‘Los hombres de verdad no lloran’ evoca la citada consideración y a partir de una historia sobre la preocupación paterna expone la pasión de un hombre y su hijo, enfermo de Legg-Calvé-Perthes (una necrosis avascular en la cabeza del fémur, con síntomas como cojera y rigidez en la cadera), por el ‘hockey’ hielo. Esa afición compartida canaliza desde la ficción lo que Lucas Castán siente por el deporte rey de su ciudad, Jaca, solo equiparable a su interés por el audiovisual. Ambas dimensiones convergen en un cortometraje, estrenado en Zaragoza, que transmite emociones con significado y concisión mediante un estilo narrativo que prioriza la expresividad de las situaciones a la verbalización.
Real Men Don’t Cry Trailer from filmdonut on Vimeo.
Castán, de 28 años, forma parte de la familia del Club Hielo Jaca y defendió durante tres temporadas la portería del laureado equipo de la liga nacional tras jugar en las categorías inferiores. La dificultad de compatibilizar la disciplina con los estudios le llevó a centrarse en exclusiva en su formación académica, desarrollada en la Universidad San Jorge. La directora Paula Ortiz, una de sus profesoras, contó con él en ‘De tu ventana a la mía’ y ‘La novia’, una experiencia enriquecedora para conocer de cerca el sector con el atractivo matiz de que el aprendizaje se enmarcara en el terreno cinematográfico. Castán debutó con ‘Alba’, corto en torno a las implicaciones de un secuestro, y con el segundo quería mostrar una imagen real del ‘hockey’, reflejar el sentimiento detrás de un deporte que debido a su carácter minoritario en España conlleva un componente ‘amateur’ aunque se practique a nivel profesional.
El ‘hockey’ contextualiza un relato cuyo eje dramático reside en el dolor de un padre, en este caso Basilio, el utillero del CH Jaca, que ve cómo la enfermedad puede impedir que su hijo no haga lo que más le gusta. Lucas Castán consultó a un fisioterapeuta con objeto de incluir en el guion un problema físico que se indicara de forma visual y sin necesidad de explicaciones, fase de documentación en la que descubrió el caso de los niños con limitaciones de movimiento en la cadera y encontró el asesoramiento de Asfape, la Asociación de Familias con Perthes.
La concesión de una beca por parte de la Diputación Provincial de Huesca favoreció el comienzo de la producción, ejecutada por Filmdonut, empresa de los hermanos Lucas y Mateo Sáez. Castán propuso el papel protagonista a Alfonso Lara, actor teatral conocido por su participación en series como ‘La casa de los líos’ y ‘UPA Dance’, y este aceptó encantado y demostró una implicación plena. Para el papel del hijo realizaron un ‘casting’ con miembros de la escuela del CH Jaca, y el elegido fue el pequeño Juan Fernández, tan disciplinado que hasta se sabía los diálogos de sus compañeros.
La vieja pista de hielo y la nostalgia
La resolución de la historia, en la que tiene una breve aparición el ‘oregonés’ Jorge Asín, encierra simbolismo, si bien su cuidada dimensión emocional se plasma con especial intensidad en la escena en la vieja pista de hielo de Jaca, donde rodaron antes de que fuera derruida. Ese ambiente enlaza con la nostalgia de Basilio, exjugador de ‘hockey’ sacudido entonces por los sueños rotos. Para los jaqueses aquella instalación tiene una carga que trasciende lo audiovisual y Lucas Castán recuerda su impacto al entrar de nuevo al recinto, tan vinculado a su infancia y adolescencia. “El mundo se me vino encima”, subraya. Por ello se alegra de haber podido grabar ‘Los hombres de verdad no lloran’ allí, detalle que confiere al cortometraje valor documental.
El Ayuntamiento local, otro de los colaboradores destacados del proyecto, concedió el correspondiente permiso, aunque el hecho de no saber con certeza cuándo iban a iniciarse las obras de demolición condicionó las fechas de rodaje. Asimismo, tuvieron que grabar por partes y aprovechar el duelo de ‘playoff’ entre el CH Jaca y el Txuri Urdin con objeto de obtener imágenes, ya que recrear un partido hubiera dado una sensación artificial.
Estrenos en Zaragoza y en Jaca
La Universidad San Jorge impulsó en enero el estreno de ‘Los hombres de verdad no lloran’ en Zaragoza, que reunió a alrededor de 500 personas en la sala magna de los Cines Aragonia. Asistieron miembros del equipo, amigos, familiares, cinéfilos y por supuesto compañeros del CH Jaca. La cita posterior en la ciudad altoaragonesa congregó a un millar de vecinos. Castán señala que, además de ser un motivo de alegría debido al cariño recibido, ambos actos supusieron un alivio porque tras un arduo proceso de dos años necesitaba cerrar esa etapa.
Con el trabajo en fase de distribución por festivales, dinámica que siempre depara agradables sorpresas, el cine aparece en el horizonte de Lucas Castán. El aprendizaje y las oportunidades determinarán si surge a medio o largo plazo. El joven tampoco desea saltarse plazos y concibe el ámbito del cortometraje como un medio para “demostrar y convencer”.