Zaragoza una ciudad verde
A casi todos nos han dicho de pequeños que, en algún momento de nuestra vida deberíamos plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo. Tiene sentido si uno ha pensado alguna vez qué podría hacer para mejorar la sociedad en la que vivimos, y hacer algo que perdure en el tiempo. Muchos habitantes de esta ciudad han tenido el mismo ideal siempre. Si hace unas semanas hablábamos de los arquitectos y artesanos que se dejaron la vida a la hora de contribuir a nuestro inmenso patrimonio urbano, ahora toca hablar de otros muchos que tuvieron el valor de poner sobre la mesa una condición innegociable: las ciudades sólo pueden ser habitables si respetamos la naturaleza.
Somos sostenibles
Quién no recuerda cuando ponerse detrás de un autobús urbano podía dejarte negro, pedíamos una bolsa de plástico al comprar cualquier cosa, o cuando cogíamos el coche para ir a la calle de al lado. Hoy en día, tenemos contendores de reciclaje en todas nuestras calles, hay 101 herboristerías registradas en el mapa del pequeño comercio del Ayuntamiento de Zaragoza, y los huertos urbanos siguen creciendo.
Iniciativa urbana: Zaragoza sin huella
Una de las tiendas de alimentación ecológica que más me han llamado la atención es SIN HUELLA, en Coso 156. Pude hablar con la propietaria Nieves Ruiz, quien confiesa que recuerda que la idea de abrir esta tienda surgió “por el deseo de poder comprar sin verse rodeada de residuos plásticos”, preocupación que comparte con sus clientes “que suelen traer sus propias bolsas”. A la hora de comprar “la gente se preocupa de que los alimentos sean sanos, que no provengan de animales”. “La gente entiende que somos lo que comemos, y se preocupan de su huella en el planeta” Respecto a la evolución de la tienda, Nieves reconoce que, con “ha pasado de 300 referencias a casi 1900, y sigue creciendo” Ya ha pensado en su próximo proyecto, incorporar nuevos productos para la limpieza”.
NUESTRA CIUDAD no es un solar: Huertos urbanos
Gran parte del deseo de volver a una vida verde se ve reflejado en el éxito arrollador que han tenido los huertos urbanos en nuestra ciudad. Iniciativas como “Esto no es un solar”, el Centro Ambiental del Ebro, o el programa Huerta Life Km 0 del Ayuntamiento de Zaragoza, han permitido la apertura de huertos urbanos, entre otros, los de San José y Las Fuentes, aunque desde hace varios años que empresas como Huertolandia o Huertos del Ebro permiten que miles de zaragozanos vuelvan al campo, trabajen la tierra con sus manos y disfruten en sus mesas de los frutos que recogen. La formación y los talleres has sido una herramienta fundamental a la hora de atraer a jóvenes y hasta niños, que junto a gente mayor han llenado miles de kilómetros de tomates, lechugas y cebollas.
Mercado Agroecológico de Zaragoza cumple 8 años
El deseo de volver a la tierra y la necesidad de reducir nuestra huella ecológica ha llevado a muchos agricultores aragoneses a comercializar sus productos con una certificación ecológica. El Mercado Agroecológico acaba de cumplir 8 años, en los que todas las mañanas de sábado se reúnen junto a la fuente de la Hispanidad en la Plaza del Pilar, y en la que se pueden encontrar todo tipo de hortalizas, galletas y mermeladas, en 19 puestos de toda nuestra provincia.
Laura Carrera: Una emprendedora fuera de lo común
Tesoros gastronómicos propone Laura Carrera, que desde su empresa Flores en la Mesa lleva años suministrando a los mejores restaurantes de España de flores frescas, y es la única empresa en Europa que las vende cristalizadas. Esta ingeniera agrónoma decidió desde joven dedicar su vida a su gran pasión: las flores, perfeccionando la manera de tratarlas y llevarlas a nuestras mesas. Laura valora mucho el asombro del público cuando les habla del tema, ya que “descubren un mundo nuevo”, y destaca el papel que se ha hecho en los medios por desarrollar la cultura gastronómica en nuestro país “hace años nadie comía espárragos trigueros, ni salsa de soja”. Resume su filosofía vital con estas palabras “sigue buscando, no dejes la inquietud por desarrollar cosas nuevas”.
Ecología urbana, Zaragoza Activa y protección de nuestros mercados
No puedo cerrar este artículo sin mencionar al grupo Ecología Urbana, parte de Zaragoza Activa, y que dos jueves al mes se reúnen para debatir y diseñar nuevas estrategias para enriquecer el ecosistema de nuestra ciudad. Su última iniciativa; repartir 1000 macetas para monitorizar la calidad del aire. Así mismo, el Ayuntamiento ha inyectado 1 millón de euros para darle nueva vida a los mercados.
¿Y ahora qué?
Y sin embargo me quedo muy corto, ya que cada día surgen nuevas iniciativas, desde el reciclaje de pilas a revivir nuestros parques, de preocuparnos por el bienestar de nuestras mascotas a exigir una alimentación limpia de venenos. Todo es fruto de nuestra necesidad de tener una vida sana en un planeta limpio. Somos muchos más los zaragozanos que queremos que nuestros hijos hereden la mejor versión de nuestra ciudad, sostenible y verde para sus habitantes y que esto sea para siempre.
Por mucha ayuda que recibamos, por mucho apoyo que proporcionen las instituciones, en realidad, todo es más sencillo: que Zaragoza sea verde y sostenible depende de ti y de mí.
Este artículo pertenece a la serie ‘A contracorriente: reencuentros con una Zaragoza cambiante’ en la que mostramos la visión de zaragozanos que han vuelto a la ciudad tras haber estado viviendo fuera durante años.
