Cuando los vi por primera vez lo supe: Javier y Juan Carlos, Ebanistería Hnos. Blasco tienen una historia. Y si tienes una historia que contar, tienes un público al que le interesa escucharla.
En los tiempos que corren, no es fácil tener un negocio propio, un espacio físico, y como es su caso, mantenerlo en pie desde los años 60. Su padre levantó el negocio. Luego, tanto Javier como Juan Carlos, fueron participando del mismo, pasando de aprendices de ebanistas, a artesanos ebanistas con todas las letras.
Un negocio tradicional, de siempre, que tiene que adaptarse a los tiempos modernos para mantenerse, sin dejar atrás su esencia, por lo que son conocidos.
Y lo son, principalmente, por la gente del barrio de Delicias, en primer lugar. El día que estuve en la puerta del taller, esperando a Juan Carlos que venía a la hora convenida, estuve charlando con una persona mayor que parecía estar también esperando a los hermanos.
Él me preguntó que si estaba esperando a entrar, y le dije que si. Me dijo que él también. Parecía que los conocía de siempre. Y como hablo con quienes me dan buenas vibraciones, estuve charlando, y comencé yo.
«¿Viene siempre aquí? ¿Los conoce desde hace mucho tiempo?» – le pregunté.
Me dijo que si, que ya conocía a su padre, y que luego el trato se mantuvo con ellos. Que los conoce de «toda la vida«. Que siempre que ha necesitado algo en madera, recurría a Ebanistería Hnos.Blasco porque los conoce «desde siempre«. Y que , cualquier problema o trabajo relacionado con la madera, ellos eran los más indicados.
Y eso es muy difícil de conseguir. Llevar toda la vida, y que te recomienden así, con ese cariño, no tiene precio.
Pero claro, es un negocio de siempre que trabaja a la manera tradicional desde que empezaron, incluida la comunicación con el exterior, con comunicar lo que hacen de puertas hacia dentro en el taller.
Y aquí creo que, como hacen mis compañeras en estrategia empresarial y en estrategia de diseño, en estrategia de comunicación podemos darle un impulso también.
Lo más importante es tener actitud, y los dos, especialmente Juan Carlos, el más tecnológico, la tienen. Conociendo los procesos de trabajo en comunicación, nos quedaron claras unas necesidades iniciales:
. Falta de imagen global de marca, para que sea reconocible en el mundo digital.
. Desconocimiento de los procesos básicos de trabajo en comunicación digital, desde los elementos básicos que tienen las redes sociales, su funcionamiento, hasta, por ejemplo, la manera de programar contenidos.
. No sistematización de los contenidos a compartir con la audiencia digital, especialmente en Instagram, que será su principal red social.
. No saben como contar lo mucho que hacen en el taller, los trabajos que realizan tan dispares, todos artesanales, a medida y personalziados.
. Les cuesta mucho tiempo pasar de la idea que qué contar, a materializarla en una publicación en redes sociales que defina esa idea realmente. Les lleva además mucho tiempo, lo que hace que la comunicación no sea fluida con su audiencia y, que les impide, llegar a públicos nuevos que puedan comprar lo que hacen.
El trabajo en redes sociales requiere varias cosas, pero alguna son esenciales sociales.
a- Tener una planificación estratégica de qué quieres comunicar.
b- Saber a qué públicos estás legando, y a cuáles quieres llegar en el futuro también.
c- Cómo vas a contarlo, cuál es la historia detrás de cada tipo de contenido que harás.
La Ebanistería Hnos.Blasco es un reto para todos los que formamos parte del equipo del MIZLab, pero su compromiso personal de mejorar como cuentan lo que hacen, ya es poner el primer ladrillo en la edificación de una estrategia sólida, realista y personalizada, para este taller «de toda la vida» que queremos que tenga un gran futuro.
