Aragón es tierra fértil para la creatividad y el arte. Dan fe de ello muchos autores y autoras a lo largo de los años. Pero hoy nos vamos a centrar en cinco de ellos por ser los ganadores de dos concursos de cómic y manga de reciente creación en Aragón.

Santa Isabel de Aragón da nombre a uno de estos premios. Concretamente el que otorga la Diputación Provincial de Zaragoza y que convoca anualmente en diferentes disciplinas. Estos premios forman parte de un programa de apoyo a nuevos creadores, que poco a poco han ido adquiriendo gran prestigio dentro y fuera de Aragón. Los tres ganadores que tenemos hasta la fecha del premio de cómic son: Jesús Bosqued, Daniel Bueno y Raquel Muñío.

El segundo premio se otorga desde el concurso Impulso Manga, organizado por la editorial de cómic de Zaragoza, GP Ediciones. Este concurso nace con el fin de «impulsar» y promover el trabajo y el talento de los autores aragoneses. Como su propio nombre indica es un concurso que premia los cómics realizados en estilo manga, o lo que es lo mismo “cómic” (historieta) en japonés. Los dos ganadores, por ahora, son: Héctor Cisneros y Alba Velasco.

Premios Santa Isabel de Cómic

Se han celebrado ya treinta y cinco ediciones del premio de arte Santa Isabel de Aragón Reina de Portugal y en parte por ello, es el máximo reconocimiento cultural concedido por la Diputación de Zaragoza. El galardón se otorga a artistas aragoneses de diferentes disciplinas. Y desde el 2022 se premia también una nueva disciplina artística, el cómic.

Estos son los tres artistas ganadores:

Convocatoria 2022

Jesús Bosqued // ‘Ojos de abeja’

Jesús estudia Derecho en la Universidad de Zaragoza y, paralelamente, perfecciona el dibujo en el Estudio Cañada. Posteriormente cambia el Derecho por las Artes obteniendo el título de Técnico Superior en Ilustración en la Escuela de Arte.

Trabaja con la directora de cine Paula Ortiz desde hace diecisiete años. Comenzando con el cortometraje ‘El hueco de Tristán Boj’ (2008). Han trabajado juntos en el desarrollo del Libro Visual de todos los proyectos de Ortiz, además de colaborar en la dirección de arte, planteamiento de la base visual, cartelería, concept art, storyboard, etc…

En ‘De tu ventana a la mía’, desempeña la labor de Diseñador Visual durante la preproducción y el rodaje, y posteriormente diseña el grafismo y la cartelería de la película. Con ‘La novia’ pasa a codirigir el Departamento de arte junto a Pilar Quintana siendo nominados a Mejor Dirección de Arte en los Premios Goya, los Premios Platino, y los Premios Simón 2016. También fue nominado individualmente a Mejor Cartel en los Premios Feroz de ese mismo año. 

El 2019 supuso un giro en su trayectoria profesional. Deja a un lado la dirección de arte y se centra en diseño gráfico e ilustración para cine. En este ámbito ha desarrollado los tratamientos visuales, a través del concept art y el storyboard, del episodio ‘El asfalto’ de la serie ‘Historias para no dormir’ (Prime, 2021) y en los largometrajes ‘Across the River and into the Trees’ (Ortiz, 2023), ‘Teresa’ (Ortiz, 2023) y ‘La virgen roja’ (Ortiz, 2024). 

También ha realizado el Arte de los videoclips ’23 de junio’ (Vetusta Morla), ‘Mares igual que tú’ (Amaral) y ‘Una canción para Laura’ (David Angulo). Para Leticia Dolera realiza el cartel del cortometraje ‘Habitantes’, el de la obra de teatro ‘Marcela’, estrenada en 2024 y diseña el grafismo del videoclip ‘En el final de los días’ (Loquillo).

Cómic premiado: ‘OJOS DE ABEJA’

«El mundo en el que vivimos cambia a gran velocidad. Un hombre de cuarenta y ocho años decide elegir la imaginación como medio para superar su propio día a día. La vida empieza a encajar si la miras desde el otro lado».

Jesús: Ese hombre, que ahora tiene cincuenta y uno, y posiblemente posea una concepto más gris de la realidad y un deseo más profundo de desaparecer en la ficción, hoy diría que ‘Ojos de abeja’ esconde una ODA a los resquicios de la pasión y de la poesía que no vemos y que sin embargo tenemos delante.

Diría que es la decisión de abandonar la realidad y pasearse por los límites de la lógica, aceptar el instinto, asumir la creencia de que hay algo más allá de la red que tejemos y nos tejen y con la que cubrimos nuestra la visión diaria. 

Es un preferir el silencio de tu piel al ruido de la muchedumbre. Es un intento de apoyar la acción consistente en traspasar los muros de granito que nos dirigen hasta la muerte instándonos en vida a la productividad, el sometimiento y la ceguera… y con esa acción, ver lo que no se deja ver. Amar, narrar y saltar al vacío. Ese vacío que da sentido real al periodo de tiempo que llamamos vida. El tebeo es el preámbulo, la introducción a toda esta mayor pretensión.

Motivos por los que te presentaste al concurso.

Jesús: El confinamiento por la Covid cambió mi recorrido y percepción profesional. Las producciones en las que estaba trabajando en ese momento se paralizaron (por un lado, estaba trabajando en el storyboard de ‘Across the River and into the Trees’, de la que solo faltaban algunas escenas, y, por otro, estábamos con la preproducción de ‘La estrella azul’ en la que era Ayudante de Arte y todo nos pilló en el quinto día de rodaje). La vida cotidiana se paró y quedó en suspenso. 

Pasé el confinamiento en mi casa y solo. Con Paula decidimos seguir con el storyboard de ‘Across the River and into the Trees’ por nuestra cuenta y riesgo. Nos comunicábamos por Skype. Se terminaron algunas de las escenas que faltaban y se arreglaron otras. Acabamos dibujando casi el 80% de la película sin darnos cuenta. 

Una vez superada la pandemia mi deseo cambió. Necesitaba seguir dibujando. Estos meses del 2020 que pasé solo y encerrado pensando en una Venecia que no había visitado en la realidad y dibujando la historia de Cantwell y Renata… parece que me reencontraron con esta parte perdida de mi mismo: ser dibujante.

Necesité recuperar el dibujo. Volví a Taj Mahal, volví a leer cómic y me centré en el trabajo de ilustración, storyboard y concept art. Un mes antes de empezar la preproducción de ‘Teresa’ no tenía ningún proyecto pendiente y me enteré de rebote de la convocatoria del premio Isabel de Portugal. Valoré el tiempo que tenía, valoré qué contar y decidí intentarlo.

¿Estás trabajando en algún cómic nuevo?

Jesús: Actualmente como autónomo estoy centrado en los proyectos de cine (y otros, sean del medio que sean). No he encontrado aún el momento para intentar acceder al mundo editorial del cómic profesional. No estoy trabajando 100% en un cómic nuevo, pero tengo dos proyectos en mente que voy desarrollando sin presión, ni fecha de entrega. 

Uno de esos proyectos es una breve novela gráfica autoconclusiva basada en un cuento de Javier García Arredondo (coguionista de ‘La novia’ y ‘Teresa’). Se trata de un cuento que formó parte de un guion de cine que no se materializó. El cuento tiene entidad propia y tiene mucho interés para mí.

El otro proyecto es ampliar ‘Ojos de abeja’ concediéndole la envergadura total que realmente tiene. En realidad, ‘Ojos de abeja’ es un fragmento pequeño del argumento de una novela propia que voy escribiendo poco a poco. La empecé a escribir en 2011 y es un texto que parte de experiencias personales y lleno de laberintos, conexiones e inconexiones.

Después de tomar un breve capítulo de la novela y convertirlo en ‘Ojos de abeja’ y tras mi experiencia en el cine y en el storyboard… vi claro que el medio adecuado para contar esta historia es la novela gráfica. Es un proyecto que me encantaría ver realizado en el futuro. 

Siempre consideré ‘Ojos de abeja’ como el episodio piloto de una serie más amplia. Y de hecho la última palabra del tebeo es un «continuará» que cumple dos funciones: por un lado, da un final abierto a la historia que cuenta y, por otro, anticipa la posibilidad de una revisión total y conclusiva convirtiéndose en novela gráfica.

Convocatoria 2023

Daniel Bueno (Dani B Good) // ‘Chistología’

Estudia Diseño Gráfico en la Escuela de Arte, cuando aún funcionaba el malogrado edificio de la Plaza de los Sitios. Después de un par de años probando en el mundo editorial y web, se acoge a un programa de estancias en el extranjero de la universidad que le permite pasar una temporada colaborando en un estudio de diseño de Buenos Aires primero, y trabajando en la Universidad de la Habana después. 

Daniel: La experiencia fue super-enriquecedora, eso sí, mucho más a nivel personal que profesional. De vuelta a Zaragoza empecé a trabajar como diseñador web en Master-D, donde pasé tres años, dos más en una agencia creativa llamada Quelinka y desde 2014 trabajo como UX/UI Designer (ahora se llama así) en Flat 101.

Aunque profesionalmente siempre me he dedicado al diseño, el dibujo y el humor fueron mis vocaciones más tempranas. Unos meses antes de la llegada de la pandemia decidí recuperar estas aficiones, que había dejado de lado, para comenzar a ilustrar y publicar mis propios chistes. En cuatro años he publicado casi 800 viñetas y animaciones, principalmente en mi perfil de Instagram (@danibgoods).

Desde 2021 formo parte de El Estafador, una publicación digital semanal de humor liderada por el artista zaragozano Javi Royo. Como miembro de este colectivo he participado en Festival Ilustrado de Teruel 2022, en el festival Cruïlla de Barcelona en dos ocasiones y en la exposición colectiva itinerante “La Gran Estafa”, que por cierto, desde septiembre hasta noviembre podrá visitarse en el Instituto Quevedo del Humor de Alcalá de Henares.

A nivel individual he colgado mis chistes en la exposición ‘Chistología Vol.I’ en el Bar Gilda y ‘Chistología Vol.II’ en el Espacio Visiones de la Fundación Rey Ardid y ‘Chistología Vol. III» en el Vingare & Rock. También he participado en la Galería Virtual en varias ocasiones. He colaborado con una portada en el proyecto colectivo ‘The Zaragozian’, dirigido por el ilustrador David Maynar y he participado con una viñeta sobre el edadismo en la publicación ‘Ahora’ de Cruz Roja.

Como diseñador a lo largo de los años he diseñado diferentes carteles y piezas para La Escuela de Rock de las Armas, el Bar Gilda (soy el creador de su imagen corporativa), el festival ‘Zaragoza Feliz Feliz’ (en dos ocasiones) y colaboro de vez en cuando con la Lata de Bombillas. He diseñado portadas de discos para Los Catalíticos, Los Gnósticos y Los Deltoides, grupo del que también formé parte.

Cómic premiado: ’CHISTOLOGÍA’

Daniel: ‘Chistología’ es una «antología» de las viñetas creadas durante mis dos primeros años como humorista gráfico. Una colección de 34 chistes de humor blanco y cotidiano de creación propia. No existe una trama ni un hilo argumental, no es un cómic al uso sino una sucesión de ideas inconexas, de chistes que fui imaginando durante dos años de pandemia. 

Lo único que pretendo con esta recopilación es despertar una sonrisa en el lector mediante la combinación de juegos de palabras, la ironía, y las metáforas visuales. Por si sirve de algo la segunda opinión de un especialista, dejo aquí una reseña de Octavio Gómez Millián.

Motivos por los que te presentaste al concurso.

Daniel: Cuando volví a coger el lápiz (en este caso el Apple Pencil) después de tanto tiempo solo tenía claro que quería dibujar, recuperar una afición en la que había destacado durante mi infancia y adolescencia. De alguna forma sentía, que había algo que se me daba bien y no le había dedicado el tiempo que merecía en los últimos años.

Fue muy gratificante partir de cero e ir encontrando un estilo gráfico y humorístico y comprobar que había personas ahí fuera que apreciaban lo que hacía y que se reían con mis chistes. Durante meses publiqué viñetas nuevas todos los días. Estaba muy motivado y me salían como churros porque no ponía ninguna barrera a la creatividad. Le dedicaba tres o cuatro horas por las noches y muchos días me quedaba dibujando de madrugada para tener una viñeta lista al día siguiente.

Las malas ideas me servían para practicar el dibujo y si tenía alguna buena ideas, el resultado final (que el dibujo estuviera bien o mal) me daba igual. Sentía que tenía recuperar mucho tiempo perdido. Y fueron pasando cosas buenas. La cuenta de Instagram Pelaeldiente que repostea viñetas de ilustradores de Latinoamérica y España empezó a compartir chistes míos e incluso conseguí que la prestigiosa publicación digital Cultura Inquieta.

«Le dedicaba tres o cuatro horas por las noches y muchos días me quedaba dibujando de madrugada para tener una viñeta lista al día siguiente.»

Empezar a colaborar con El Estafador, de Javi Royo, fue la guinda. Javi es, además de un gran artista, un tipo generoso, abierto y muy predispuesto a conocer y conectar gente nueva. Le debo mucho a él y todo el elenco de colaboradores y excolaboradores de El Estafador.

Un día en la sala de espera del médico leí un artículo en el Heraldo leía una reseña sobre el «Santa Isabel» que había ganado Jesús Bosqued el año anterior. Conocía el premio pero lo asociaba a otras disciplinas. Pensé, ¿por qué no?. Realicé una cuidadosa selección de las viñetas que me parecían más graciosas o ingeniosas, por aquel entonces ya llevaba unas 500. Las «remastericé», maqueté y envié.

Ganar el premio supuso una sorpresa y una alegría inmensa. Todo el reconocimiento recibido y el interés de los medios (como el programa Atónitos Huéspedes) me hizo sentir como si hubiera logrado una gran hazaña. Lo tengo muy reciente porque, aunque el premio me lo concedieron el año pasado, el acto de entrega tuvo lugar antes de verano. 

Fue genial, Javi Royo vino desde Barcelona para apadrinarme ese día por lo que le estaré eternamente agradecido. También conocí en persona al gran Jesús Bosqued, que es un tipo excepcional y me ayudó mucho desde el momento en que se enteró de que había sido el ganador. David Maynar también me dio su apoyo asistiendo al acto.

¿Estás trabajando en algún cómic nuevo?

Daniel: No soy muy de hacer planes a futuro y a decir verdad, no tengo ningún proyecto entre manos. Mi vida ha cambiado mucho, acabo de ser padre de una niña y sacar tiempo para dibujar ya no es tan sencillo. De hecho estoy adaptando mi estilo para poder seguir publicando.

De momento me conformo con seguir dibujando y continuar colaborando en El Estafador. Lo único que se necesita para que pasen cosas es ser constante, no compararse y tratar de disfrutar con lo que uno hace, así que estoy convencido de que en el futuro surgirán nuevas oportunidades y proyectos.

Convocatoria 2024

Raquel Muñío (Hobblin) // ‘Monuki’

Se gradúa en Bellas Artes en la Facultad de Teruel. Después se especializa en diseño de personajes realizando un máster de Concept Art para Videojuegos en Madrid. Y actualmente, es profesora de dibujo en un grado de animación mientras intenta desarrollar su carrera personal como ilustradora (y dibujante de cómic) bajo el seudónimo “Hobblin”.

Cómic premiado: ‘MONUKI‘

Raquel: Mi propuesta se titula ‘Monuki’, y en ella seguiremos la historia de Riko, un niño que vive en una aldea de cazadores de monstruos.

A diferencia de los demás aldeanos, a él no se le da nada bien la caza, más bien es un artista en potencia que busca comprender y plasmar el mundo que le rodea; le tocará ir a contracorriente para poder encontrar su verdadero papel en el mundo. 

Será una primera aproximación a esta aventura, porque en mis planes es sólo una pieza de una historia y de un worldbuilding más extensos. Aún así creo que es una historia amena y divertida de leer para todos los públicos.

Motivos por los que te presentaste al concurso.

Raquel: Vi una publicación en las redes sociales de la Asociación Aragonesa de Autores de Cómic sobre el concurso y lo primero que pensé fue, “¿el plazo termina en diez días? ¡No llego ni de coña!”, pero realmente lo tomé como una señal de que tenía que ponerme en serio a crear. 

Nunca había hecho un cómic, solo ilustraciones y diseños sueltos para videojuegos, pero me encanta la narrativa y crear historias; además muchos de mis referentes son grandes autores de cómic y siempre he tenido esa espinita. Como digo fue un reto autoimpuesto para ver si era capaz de hacerlo, llevaba una larga temporada deprimida y me sentía incapaz de crear nada que mereciera la pena. 

Ponerme ese objetivo (no el ganar, sino conseguir terminar algo digno de entregar) me hizo callar las voces de mi cabeza y mover el culo. Tras esos diez días de esclavizarme a mi misma y poder entregarlo ya me sentía ganadora.

¿Estás trabajando en algún cómic nuevo?

Raquel: Ahora mismo todavía estoy terminando ‘Monuki’, que pronto estará listo, así que de momento se lleva toda mi atención. Por supuesto después me encantaría seguir la historia y desarrollarla más, aunque también tengo historias con un tono más adulto y oscuro que me gustaría sacar a la luz.

Pero primero, lo primero. 

Premios Impulso Manga

En 2022 nace este premio, gracias a la editorial Gp Ediciones, y si estás interesado o interesada en participar puedes entrar AQUÍ y apuntarte en su tercera edición. El manga (para los no iniciados) son los cómics, las historietas realizadas en Japón y desde la década de 1990 se ha popularizado de forma mundial (y exponencial).

Es un tipo de cómic que llega de una manera especial al público adolescente, tanto en el apartado artístico y gráfico, como en el narrativo y en los temas que trata. Esto hace que las nuevas generaciones de jóvenes dibujantes opten, a la hora de expresarse, por esta opción. 

Los dos mangakas ganadores son:

Convocatoria 2022

Héctor Cisneros (Kaise) // ‘Happy Egg’

Héctor es el ganador de la primera edición del concurso Impulso Manga con su cómic «Happy Egg» que ya se puede encontrar en todas las librerías. Es dibujante de manga, profesor de japonés y de dibujo. Tras quedar maravillado por el mundo del manga y el anime a los catorce años, descubrió su vocación por escribir y dibujar sus propias historias.

Con este objetivo en mente, estudia el Grado superior de Cómic, en la Escuela de Artes de Zaragoza. Tras terminarlo, entra en la academia Blackfolio, donde aprende de profesionales como David Daza y David Cobos. Tras varios años formándose como profesional, ilustrando portadas y participando en fanzines como @fterComics, se presenta al primer concurso Impulso Manga.

Cómic premiado: ‘HAPPY EGG’

Según dice su contraportada: ¡¡Aquel que consiga este huevo, alcanzará la felicidad!! En un mundo en el que las personas están obligadas a cumplir una misma tarea durante toda su vida, Pinipa, una niña cuya labor consiste en transportar piedras de una montaña a otra, sueña con obtener el Happy Egg, un huevo que es capaz de hacer que cualquiera encuentre la felicidad. 

Un día, por azares del destino, Pinipa es liberada de sus tareas indefinidamente. ¿Cómo cambiará su vida tras obtener la libertad que tanto deseaba? ¡Una niña delirante, una diablesa y un hombre cebolla se enfrentan a un mundo cruel, en una historia tan introspectiva como absurda! ¡¡HAPPY, HAPPY, HOO!!

Motivos por los que te presentaste al concurso.

Héctor: Durante varios años había estado dandole vueltas a un proyecto personal, el típico que todo artista novato tiene en su mente con sus personajes e historias que le acompañan desde hace tiempo. Cuando por fin me di cuenta de que era este era un proyecto inabarcable y debía centrarme en proyectos más pequeños y realistas, empecé a sentir que mi pasión iba disminuyendo. 

Estaba progresando como artista, sí, pero yo siempre he sido más escritor que dibujante y necesitaba esa historia propia que me llenase y me diera un objetivo. Así que me planteé que debía idear un proyecto personal, pero en miniatura. Un One-Shot, un manga corto. Acostumbrado a que mis historias favoritas fueran largas, protagonizadas por muchos personajes y repletas de subtramas, era un paso difícil. 

Decidí que empezaría con una historia muy corta, la cual intentaría publicar en Planeta Manga. Para crear una historia interesante en tan poco espacio, debía centrarse en un solo tema o un concepto muy potente que provocase una fuerte impresión en el lector. Así, juntando ideas de varias historias desechadas e ideando un núcleo potente y atractivo, surgió la semilla de lo que se convertiría en ‘Happy Egg’. 

La idea fue creciendo en mi mente, y cuando ya estaba algo más desarrollada, oí hablar del concurso Impulso Manga a través de mis profesores. Ya había participado en un concurso en el pasado, concretamente un concurso global organizado por la Shounen Jump (ya os podéis imaginar que no salió bien). Pero este, al ser un concurso a pequeña escala, se convirtió en un objetivo posible.

«En una una sola mañana conseguí definir el mundo y los personajes de la historia en un torrente de ideas que conectaron entre sí casi por arte de magia»

En ese momento pretendía presentar dos historias al concurso. Por un lado estaba un seinen psicológico de acción, ambientado en un mundo de fantasía oscura, y por otro, ‘Happy Egg’. La primera opción era interesante, visualmente hubiera tenido mucho tirón, pero las escenas de acción hubieran ocupado muchas páginas y el propósito de la historia era más difuso, así que me decanté por ‘Happy Egg’.

Para participar en el concurso debías entregar las primeras seis páginas de la obra, acompañadas de un resumen de la historia. La creación de esas primeras páginas fue algo inusual para mí, posiblemente la parte del proceso que más disfruté. Y es que, no sé si me poseyó alguna clase de demonio o ese día había desayunado fuerte pero tuve una de las mayores sesiones creativas que he tenido nunca. 

En una una sola mañana conseguí definir el mundo y los personajes de la historia en un torrente de ideas que conectaron entre sí casi por arte de magia, como si no fuera yo el que estaba escribiendo la historia, sino otro escritor que vive dentro de mí. Yo mismo estaba sorprendido ya que siempre había tenido dificultades para trasladar mis ideas al papel, y de repente, ese proyecto abstracto que había tenido en la mente durante meses tenía una forma concreta, y además una que me encantó. 

Esa mañana se definió gran parte del contenido de la historia, mundo, personajes, etc. Ese día creé el boceto y los diálogos de las primeras páginas de ‘Happy Egg’, y a partir de ahí estuve unos días practicando y estudiando los acabados para que se pareciera lo máximo posible a un manga japonés. El resto del desarrollo estuvo repleto de dificultades… pero eso es otra historia. 

¿Estás trabajando en algún cómic nuevo?

Héctor: He estado el pasado año dibujando ‘Happy Egg’, a un ritmo frenético de unas 10 horas diarias (que es lo que me cuesta hacer una página), así que no he podido hacer nada más. De hecho, he tenido que dejar de lado mi trabajo a media jornada como profesor de extra escolares (clase de japonés y clase de dibujo) porque sino no, no llegaba a la entrega y me hubiera pegado una eternidad con el proyecto. 

La verdad es que ha sido una locura, una época muy difícil. A partir de ahora planeo participar en varios encargos profesionales o semi-profesionales de diferentes tipos: ilustración, diseño de personaje, cómic, etc… con la supervisión de mis profesores de Blackfolio, abordando cada vez encargos más grandes hasta que pueda poco a poco convertirme en un freelance que pueda ganarse la vida con el dibujo. 

Ese es el plan original, pero por supuesto si ‘Happy Egg’ va muy bien o me abre otras puertas que ahora mismo no soy capaz de ver, todo puede cambiar.

Convocatoria 2023

Alba Velasco // ‘Llamada al vacío’

Alba: Mi nombre completo es Alba Velasco Fernández y estoy tratando de dedicarme al cómic. Actualmente tengo veinte años, de manera que apenas estoy comenzando a meter el pie en esta disciplina y no cuento con un gran recorrido profesional, pero trato de trabajar duro por ello y mirar el futuro con optimismo. 

El mundo del dibujante de cómic es un campo muy vocacional, así que mientras tenga manos para dibujar voy a hacer lo imposible por dedicarme a crear historias, como las que tanto me han ayudado y acompañado a lo largo de mi vida. Nací en Elche, Alicante y fui criada junto a mis tres hermanos por mi madre, quién siempre luchó por darnos la mejor vida posible.

Desde niña recuerdo refugiarme en las historias y, más tarde, en el dibujo para abstraerme y hacer más llevadera mi situación. Ahí descubrí el poder que los relatos tienen para acompañarnos, permitirnos experimentar y aprender en un lugar cercano al que podemos asomarnos y explorar todo tipo de situaciones sin consecuencias. Permitiéndonos además obtener herramientas para afrontar la vida e incluso, forjarnos como personas. 

Más que escoger estudiar arte, diría que estudiar arte era el único camino con sentido para mi. A los diecinueve años y tras pasar un tiempo dedicándome a ilustrar material para creadores de contenido online me mudé a Zaragoza con el apoyo de mi madre y comencé los estudios del Grado Superior de Cómic, en la Escuela de Artes de Zaragoza.

Cómic premiado: ‘LLAMADA AL VACÍO’

Alba: ’Llamada al vacío’ es un relato tanatológico en el que, a través de una premisa fantasiosa, se explora el duelo y la culpa. Todo gira en torno al concepto de la “llamada al vacío”, una expresión francesa referida a los pensamientos intrusivos que anulan nuestro instinto de autopreservación.

En esta historia, Clara, la protagonista, batalla con esta llamada tras la pérdida de su hermano. Pronto el “Vacío” se cansará de llamar sin respuesta y le impondrá obstáculos cada vez mayores con el fin de lograr segar su vida. Mientras ella buscará a contrarreloj el alma de su hermano con el fin de intercambiarse por él y devolverlo a la vida.

Motivos por los que te presentaste al concurso.

Alba: Me enteré del certamen en la Escuela de Artes de Zaragoza, gracias a que Daniel Viñuales (editor de GP Ediciones) vino en persona a presentarnos la iniciativa. Poder participar en el concurso fue para mí una prueba autoimpuesta, con el único objetivo de practicar y asumir el reto de preparar una propuesta en un plazo limitado. 

Nunca me imaginé que este reto fuese a ir seguido de uno aún mayor, la realización de la obra completa y que me daría la oportunidad de cumplir mi sueño. Por eso creo que es mi turno, que tengo que dar todo de mi y aprovechar el “impulso” que se me ha dado para dedicarme a lo que tanto amo. 

¿Estás trabajando en algún cómic nuevo?

Alba: Estoy trabajando en ‘Llamada al vacío’ y no pienso en otra cosa.

Para terminar este artículo sobre creatividad, premios y cómic, y en espera de que lleguen nuevos nombres para el cómic aragonés, me gustaría hacerlo con una frase del autor de Míchigan (que nada tiene que ver con Aragón), Craig Thompson en su último cómic ‘Raíces de Ginseng’ publicado por Astiberri Ediciones “Crear resulta mucho más satisfactorio que consumir ¡Vamos a hacer tebeos!”.

Pues eso… ¡Vamos a hacer tebeos!