
Una de las propuestas culturales para peques (y no tan peques) más originales y especiales que tenemos en Zaragoza son el grupo aragonés MikrÓpera.
Como su nombre indica, y no deja lugar a dudas, nos traen la ópera para degustarla en pequeño formato y orientada de forma especial a los mini espectadores.
MikrÓpera llevan ya una buena temporada actuando y con un éxito de público creciente que año tras año descubre y redescubre el placer de la música.
MikrÓpera versiona fragmentos de conocidas obras, las interpreta en castellano y de fondo usa tanto los libretos de las propias obras como cuentos clásicos infantiles. Este el caso de su último estreno, que tuvo lugar en nuestra ciudad estas pasadas Navidades: CaperuZita Roja.
CaperuZita colgó el cartel de localidades agotadas y dejó encantados a los peques con el cuento de Perrault y la música de Mozart de Don Giovanni.
Vamos a conocer un poquito más a su directora y fundadora, Zelia Lanaspa a través de una entrevista.
¿Cómo nace el proyecto de Mikrópera y quiénes lo forman?
El proyecto surge en una reunión de músicos aragoneses con la ilusión de acercar la ópera y la lírica a todo tipo de público, y en especial a los más pequeños. La compañía se nutre de jóvenes músicos que aportan su pasión por la música en escena. Nuestra primera obra se estrena en junio de 2008 con «Hansel y Gretel». El éxito de la propuesta nos anima a seguir en la producción de nuevas obras «¿Hormiga o Zigarra?», «Plumas de Seda», «Mujeres de Ópera», «La Flautika Mágica» y nuestro reciente estreno «CaperuZita Roja».
En nuestro último montaje contamos con David Pellejer al piano, Angel Baile tenor, Zelia Lanaspa soprano y Pablo Vicente en producción.
Cuéntanos un poquito más sobre ti.
Además de mi formación como cantante en el Conservatorio de Zaragoza, he ampliado mis estudios en arte dramático, clown, títeres, danza y dirección de escena.
Soy la directora de MikrÓpera y autora de cada obra desde la pasión de contar y cantar historias de una manera diferente, compartiendo la magia de la escena con toda la familia.
¿En qué varía vuestro formato con el de una ópera completa?
Desde el principio optamos por un formato propio con adaptaciones de óperas y cuentos, con una duración de 1 hora como máximo.
A menudo los adultos nos dicen que se les ha hecho muy corto, si breve… ¡dos veces bueno!
Apostamos por una cuidada traducción de los textos en castellano, para que todo el mundo pueda acceder a la magia de la palabras en*cantadas.
Y por último, aderezamos la dramaturgia con mucho humor, ¡tanto para pequeños como para grandes!
He podido veros en dos ocasiones e impresiona lo atentos que están los niños. ¿Es un público más abierto que el adulto?
El público infantil sobre todo es un mucho más sincero. Se involucra, participa, canta y grita ante los «malos». Cuando iniciamos nuestra andadura no sabíamos muy bien cómo iba ser la respuesta ante el público más crítico. El resultado en cada nueva producción no deja de sorprendernos, cuando a menudo se enteran del argumento de las obras mucho más que los adultos …
Tenéis un estreno cada año, ¿es así? ¿Ya tenéis en mente el próximo?
Por las cuentas nos sale uno cada año y medio, ¡jajaja!. El proceso creativo de un nuevo montaje lleva bastante tiempo, desde la idea inicial hasta el estreno encima de un escenario, puede pasar casi un año. ¡Ideas para nuevos montajes no nos faltan, claro! Lo que suele faltar es más tiempo y financiación, pero sí, ya tenemos en mente nuestro nuevo proyecto … pero aún no podemos contar nada, solo que esperamos se pueda estrenar a principio del 2018, que será nuestro décimo aniversario.
¿Cómo seleccionáis los fragmentos?
Tanto si la obra es una reducción de una ópera, o la adaptación de un cuento, seleccionamos los números musicales manteniendo la coherencia del tono emocional de los personajes, y también con lo que va sucediendo en la historia. Y siempre que es posible intentamos respetar la traducción del texto original. Por ejemplo, en nuestro último montaje «CaperuZita Roja», el lobo canta las arias y dúos del personaje de Don Juan de la ópera «Don Giovanni» de Mozart, ya que hemos buscado un lobo menos sangriento y más seductor, acorde a las terrenales seducciones del siglo XXI.
¿Interactúan mucho los niños en vuestros espectáculos?
Sí, ¡un montón! A veces se entusiasman tanto, dando indicaciones a los personajes sobre los «malos», que tenemos que parar la acción en el escenario y pedir silencio para poder continuar.
¿Y los mayores? ¿Qué feed back os encontráis al final de las funciones?
Parte del éxito de MikrÓpera creemos que se debe a que las obras tienen diferente nivel de lecturas, con lo que tanto los niños como los mayores disfrutan de las historias y de la música.
Los adultos nos suelen comentar también los valores que resaltamos en las obras, amistad, valentía, aprendizaje, cooperación, y que de una manera fácil llegan hasta los más pequeños.
¿Desde qué edad recomendáis que los peques asistan a vuestros montajes?
La edad recomendada es a partir de 3 años para nuestros actuales montajes. Sobre todo porque a esa edad los niños ya saben que en el teatro hay que guardar silencio, para que todo el mundo pueda escuchar lo que sucede. A menudo vienen niños más pequeños, por lo que nos estamos planteando producir alguna obra para los súper pequeños.
¿También colaboráis de alguna manera con los coles o tenéis pensado hacerlo?
Desde el 2008 colaboramos con los centros cívicos a través del programa «Vamos al Teatro» del ayuntamiento de Zaragoza, con el que llevamos la ópera a muchos niños de coles de Zaragoza. También acudimos con nuestras obras a todos los colegios que nos lo solicitan, incluyendo fichas didácticas para trabajar en clase.
Encantados de tres años en la programación «Clásicos a la Escuela» con los coles de la comarca del Ribagorza. Y esperando repetir una preciosa experiencia con coles de educación especial.
¿Percibes Zaragoza como una ciudad que ama la música?
Zaragoza es una ciudad que ama la música, y es algo que comprobamos cada vez que actuamos. Nuestra propuesta de «ópera para niños» en principio sonaba un poquico rara, pero tras casi nueve años MikrÓpera se ha consolidado como proyecto, y eso gracias a todos: las entidades, gestores culturales y público que nos ha dado su apoyo a lo largo del tiempo.
Bien es verdad que todavía nos quedan algunos espacios zaragozanos que encantar, ¡ya llegarán! De momento el próximo febrero volvemos por cuarta vez a la programación infantil del ayuntamiento de Málaga.
Y por último, ¿qué recomendaciones nos das para que los peques escuchen y sobre todo disfruten de la música clásica y la ópera en casa?
Nuestra recomendación es disfrutar de todo tipo de música en familia : cantar, bailar, escuchar y divertirse con momentos mágicos y musicales con los niños. Más música y lectura y menos tele y videojuegos. Y para descubrir la ópera, una buena sesión en compañía de MikrÓpera.