Diego Burdío es un ilustrador zaragozano que resultó ganador del Certamen de Cómic de la promoción Jóvenes Creadores convocado por el Instituto Aragonés de la Juventud el pasado año.
Diego nació en 1981 una lluviosa tarde de verano. Pronto se pondría a dibujar para pasar el rato, cosa que le acabó gustando, así que se dedicó a colaborar en fanzines (Proyecto Sapo), sacar sus propios cómics autoeditados (Rayada de coco, Cuaderno de viaje: Shanghai), editar un cómic (Hotel Safari), junto a su grupo de amigos y autoeditar Nadine y Daniel junto a Carolina Albalá.
Actualmente colabora en la revista de cine digital Cinemascomics, el internacionalmente conocido comic on-line El Estafador y sigue preparando proyectos que pronto verán la luz.
¿Cómo empezaste en esto y cuáles dirían que fueron tus primeros pasos?
Empecé participando en el fanzine Proyecto Sapo. Cuando tenía 16 años, mi padre me trajo un día un recorte del periódico. Él sabía que me gustaba mucho dibujar, así que cuando vio que buscaban gente para participar en el fanzine, no dudó ni un momento en que era algo que me gustaría.
¡Yo no sabía ni que era un fanzine! Me incorporé en el número 2. Aprendí diferentes cosas del mundillo con ellos.
¿Qué guardas de esa época de fanzines?
Guardo a toda la gente que conocí que ahora se han convertido en amigos y en compañeros de la vida. Además, la forma de entender el arte (no sólo el cómic). En el arte, a todo hay que darle una oportunidad. No hay que prejuzgar. Estar en grupo te muestra a ir más allá de tus gustos personales.
¿Cuáles son tus influencias?
Muchísimas. Empecé con el manga japonés y con cómic español como SuperLópez. Mi estilo ha ido evolucionando y aprendiendo de diferentes artistas.
¿Dibujante favorito?
Me encantaba el estilo del catalán, Ricard Castells. Sus colores, trazos… era muy artístico y sabía crear atmósferas muy emotivas.
¿Cómo ves el panorama actual en España?
España está sobrado de artistas impresionantes. Hoy en día, gracias a las redes sociales, es más fácil encontrar a nuevos artistas con una calidad increíble que están trabajando desde sus casas. A veces ocurre que hay ilustradores españoles detrás de videojuegos, pero no se les da la visibilidad adecuada. Vivir de ello es muy complicado. En España falta mucha cultura del cómic. Por ejemplo, en Angoûleme, puedes ver como el hijo, el padre y el abuelo van a juntos a comprar cómics. En España se prefiere dedicar el tiempo libre a otras cosas.
¿Y en Aragón?
Existe una buena cantera de dibujantes. Cada vez nos conocemos más y te das cuenta de que en Zaragoza somos más de los que pensamos.
Si eres dibujante, ¿hasta qué punto te ayuda que haya un Salón del Cómic en tu ciudad?
Es un punto de encuentro y una oportunidad para mostrar tu trabajo.
¿Qué te gustaría dibujar?
Hace unos años, habría aspirado a dibujar un cómic de Spiderman. Ahora me encantaría crear una historia propia que guste a un editor y que lo quiera publicar.
(Eso si, si me ofrecen Spiderman no me negaría…).
¿Qué tipo de cómic te gusta leer?
Cómic español e independiente. Sobre todo me gusta lo costumbrista, las historias cotidianas. Aunque también me gusta bastante la fantasía.
¿Si solo pudieras recomendarnos un cómic?
Los combates cotidianos, por ejemplo, ha marcado un antes y un después en mi forma de entender los cómics.
¿Qué es lo más difícil de dibujar?
Hay cosas que se te resisten. En mi caso algunos animales o perspectivas. Siempre encuentras cosas que imaginas claramente en tu cabeza pero es complicado plasmar en papel.
¿Música que usas para inspirarte?
Jazz y Blues. Hace poco he descubierto un grupo nuevo que me encanta: The Underscore Orkestra.
¿Un lugar de Zaragoza dónde perderte?
La zona de La Madalena y Casco Viejo. Me encanta ese aire bohemio y acogedor de cada una de sus calles. Y, sobre todo, El Armadillo Ilustrado… una librería diferente en Las Armas que encantará a los apasionados del diseño, el cómic y la ilustración.
¿Qué consejo darías a alguien que se plantea ser dibujante?
Que no lo deje. Aunque haya momentos difíciles en los que apenas puede dibujar, que siempre intente ir más allá. Que trabaje y se rodee de gente a la que le guste lo mismo que a él.
Genial dibujante, me encanto Hotel Safari!